Embajada de la Federación de Rusia en la República de Chile
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10 marzo / 2022

Comunicado de la Embajada de la Federación de Rusia sobre la operación militar especial de Rusia en Ucrania

La Federación de Rusia es objeto de una guerra informativa desplegada a escala sin precedentes por los grandes medios de comunicación y redes sociales apoyados e incluso instigados por gobiernos occidentales. La principal arma son noticias falsas (fake news) e imágenes adulteradas o fuera de lugar acerca de la operación militar especial de Rusia en Ucrania. En virtud de ello consideramos pertinente hacer de amplio conocimiento público lo siguiente.

La operación militar especial de Rusia en Ucrania tiene por objetivo salvar las vidas y proteger la integridad física, psicológica y cultural de los civiles en la región de Donbás quienes a lo largo de los últimos 8 años han sido objeto de abusos y maltratos por parte de las autoridades ucranianas. Rusia no pretende ocupar los territorios del país vecino ni desmoronar el Estado ucraniano pero sí se esforzará por desmilitarizar y desnazificar al régimen de Kiev, así como llevar a la justicia a los que hayan cometido numerosos y atroces crímenes contra los habitantes de Ucrania – ucranianos, rusos y rusoparlantes, que resultaron en más de 14 mil personas fallecidas, muchos de las cuales menores de edad. Además, Rusia se vio obligada a realizar la operación militar especial para asegurar sus propios intereses en materia de seguridad nacional, debido al paranoico anhelo Gobierno de Ucrania de incorporarse a la OTAN, lo que significaría traer al inamistoso bloque directamente a las fronteras de Rusia. A ello se suman las conocidas ambiciones nucleares de Kiev. De esa manera, Rusia hubiera tenido en sus puertas un ejército perfectamente equipado y entrenado, dotado con armamento nuclear, y, como ya es de amplio conocimiento, biológico, y dominado por ultranacionalistas rusófobos.

En el marco de la operación militar especial las Fuerzas Armadas de Rusia operan con sumo cuidado bajo estrictas órdenes de evitar a toda costa o minimizar en lo posible el daño a la población civil. Las ciudades y los objetivos no militares de Ucrania no son bombardeados por los rusos a pesar del hecho de que las fuerzas nacionalistas ucranianas despliegan su artillería pesada y sistemas de defensa aérea (que habían sido suministrados y siguen enviándose por el Occidente) en las zonas densamente pobladas, manteniendo a la secuestrada población civil en calidad de rehenes.

Es evidente que los influyentes medios de comunicación occidentales – que sirven de referencia para muchos países en todas partes del mundo – presentan deliberadamente al público la información sesgada y parcial, ignorando y desconociendo la génesis del conflicto, las razones de Moscú y la desastrosa situación humanitaria en las regiones ucranianas de Donbás. Las agencias de información hacen caso omiso de la situación real en muchas localidades en el este de Ucrania que todavía quedan bajo el dominio de las fuerzas ultranacionalistas ucranianas. Estas últimas aparentemente están fuera del control del poder central y usan el alto al fuego exclusivamente para reagrupar sus unidades y equipos militares en localidades bajo su dominio y acusar después a los rusos por supuesto sabotaje.

Rusia intenta hacer todo lo que está a su alcance para minimizar y/o mitigar el daño a la población civil. No deja de buscar soluciones posibles y sigue creando condiciones para que la población de las zonas liberadas regrese a una vida pacífica y segura, tenga asegurado el acceso a la asistencia humanitaria, evacuar de manera organizada y segura a la población civil de las zonas de combate. Desde el inicio de la operación militar especial, casi 190 mil personas han sido evacuadas de zonas peligrosas de Donbás, de las cuales más de 50 mil son niños. En distintas partes de la Federación de Rusia funcionan más de 7 mil puntos de alojamiento temporal, donde los desplazados tienen asistencia médica necesaria, incluida la vacunación contra el COVID-19 y otras enfermedades infecciosas, los escolares asisten a las clases. La asistencia humanitaria continúa acumulándose en los puntos de recogida y ya se han acopiado más de 12.000 toneladas. Con la participación activa de la Cruz Roja de Rusia y otras ONG´s locales 497 toneladas de carga fueron entregadas a los necesitados, en total se realizaron 62 acciones humanitarias en las regiones de Kiev, Járkov, Jersón, así como en las Repúblicas Populares de Lugansk y de Donetsk.

Rusia sigue firme en su disposición a declarar el alto al fuego (régimen de silencio) y organizar los corredores humanitarios siempre y cuando se dan condiciones necesarias. En este sentido durante las tres rondas de negociaciones entre Rusia y Ucrania se hizo énfasis especial en los aspectos humanitarios y evacuación de la población civil. Rusia cumplió con todas las condiciones que había presentado la parte ucraniana en términos de cronograma, rutas seguras y seguridad en general. La Parte Rusa anunció 10 nuevas rutas seguras (vías de evacuación) por para que entraran en funcionamiento el 10 de marzo.

Es especialmente indignante que los batallones ultranacionalistas ucranianos retienen a unos 5 mil extranjeros, mayoritariamente de origen asiático y africano. Las propuestas de Rusia de abrir corredores humanitarios especiales para los foráneos hasta ahora fueron rechazadas por la parte ucraniana. Las autoridades rusas mantienen estrechos contactos con Gobiernos cuyos ciudadanos aún quedan varados en Ucrania. En particular, se logró gestionar la salida de 298 ciudadanos hindúes quienes fueron trasladados a su país en avión enviado por el Gobierno de la India.

Para aliviar la salida de los civiles de la zona de conflicto, las autoridades rusas establecieron a partir del 5 de marzo del a.c. régimen especial de entrada a Rusia de los extranjeros provenientes de Ucrania y los territorios de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, que los exonera del visado y permite el ingreso con un documento de identidad reconocido en Rusia, vigente o caducado. Al entrar en el país, los ciudadanos extranjeros podrán permanecer legalmente en su territorio hasta 15 días.